¡12 de abril de 2008. Hoy hace trece meses que te has ido!
Trece meses han pasado ya desde que te ganaste la Verdadera Vida y te nos adelantaste. Sigo echándote a faltar Dolors, mi vida, y me he acordado de un sueño que tuve la semana pasada durante las siesta. Sólo recuerdo el final, lo que produjo que me despertara, pero me fue tan bien, lo necesitaba tanto, cariño mío. No sé donde estábamos, en casa, pero no vi bien el lugar, sólo vi que te me acercaste y me pedías que te abrazara muy fuerte, muy fuerte y yo te empecé a abrazar y tú me decías que más fuerte y por todo el cuerpo y era tan agradable tenerte entre mis brazos y apretando lo hacía tan real, tan real, que me desperté. Me quedé quieto en la cama, sin moverme, repitiendo mentalmente el abrazo y sintiéndolo una y otra vez y empecé a hacerme consciente de tu ausencia física y los ojos se me empezaban a arrasar y las lágrimas querían salir otra vez, pero yo no lo deseaba porque no te quiero hacer sufrir y entonces, yo no sé si fui yo o si fuiste tú, lo extraño es que yo pienso en castellano y tú piensas en catalán, el caso es que oí dentro de mi cabeza "aixeca't i fes coses de la casa" (levántate y haz cosas de la casa). Lo cierto es que había dejado una lavadora puesta antes de irme a dormir la siesta y sin esperar más y a fin de que no terminara la cosa en llanto, después de la sensación tan agradable de haberte abrazado, me levanté y en el momento que lo hacía, tuve el flash de que no había ido a hacer la primitiva que como recordarás hacemos entre todos los amigos prejubilados de Telefónica y que yo me encargo desde hace más de 10 años. Como sólo jugamos el jueves y era jueves por la tarde o me levantaba y me vestía o se perdía esa semana, así que en un momento ya estaba por la calle y mientras volvía a casa, hablándote como siempre, te pedí alguna señal, algo que completara el abrazo que te había dado en sueños y el escuchar tu frase que me retiraba de la situación de lloro en la que podía haber entrado. Y al llegar a casa bajé el correo, como sabes que hago cada dos por tres, y tenía un mensaje muy bonito de una tal Nieves. Eso ocurrió el 3 de abril y me acuerdo porque, como hago siempre, dejé escrito su mensaje con la fecha en el fichero correspondiente. Fíjate Dolors, Nieves me decía en su mail que nuestra página, tú pagina web, le había servido mucho, le había dado respuestas, y había resultado ser una señal de su marido, Ramón, que hacía 10 meses que había pasado al Otro Lado a causa del cáncer, para ella y de la misma manera, ese mail recibido en ese momento, también fue una señal de tí para para mí. Dolors, me alegro mucho de que entre los dos, tu en el Otro Lado y yo en éste, a través de la página de Homenaje que te prometí que te dedicaría, estemos ayudando a muchas personas, cuando la leen, a coger ánimos y a comprender mejor que sus seres queridos que se han ido físicamente de su lado, continúan vivos en el Otro Lado y que es posible la comunicación entre ambos lados porque la muerte no existe. Te quiero Dolors y el paso del tiempo no hace mella en mí. Te sigo queriendo igual y te repito que eso no impide que te desee que seas libre y vueles feliz en Tu Mundo, porque sé y noto que tú tampoco nos olvidas a nosotros y nos sigues queriendo y cuidando.